Garbanzos de viajes
Soy elianafoodie, cocinera y narradora que comparte recetas, viajes y reflexiones sobre valores humanos para conectar con tu esencia y emociones.
Elianafoodie
5/8/20241 min read


Garbanzos de viajes
Esta es una de esas recetas que aprendí a amar con el tiempo.
Cuando llegaba del colegio, no me gustaba mucho comer lo que aquí llamamos “granos”: fríjoles, lentejas, blanquillos… y, claro, los garbanzos tampoco eran mis favoritos.
Pero la vida siempre tiene su forma de hacernos reconciliar con los sabores. Años después, en un viaje a Madrid, probé por primera vez unos garbanzos guisados con chorizo, y fue amor inmediato. Desde entonces, se volvieron una insignia mía, y por fortuna, no solo me encantan a mí, sino a todos los que los prueban.
Para prepararlos, cocino el chorizo y lo parto en trozos. En esa misma olla a presión, después de freírlo, agrego los garbanzos —no los dejo muy blanditos, porque termino la cocción al final—.
A propósito, ¿sabías que el agua del garbanzo puede servir para hacer merengue? Eso sí, esa es otra receta.
Cuando los garbanzos están al dente, retiro el exceso de agua y agrego pasta de tomate, un poco de sal y una pizca de azúcar para balancear la acidez. Dejo cocinar a fuego bajo hasta que espesen. A veces uso un toque de maicena para darles textura cremosa, pero con cuidado, porque si se pasa, opaca el sabor.
Aparte, a veces preparo chicharrón y aguacate para acompañar, aunque la verdad, estos garbanzos por sí solos ya son una comida completa. En algunos hogares se sirven con arroz, en otros solos, pero en todos reconfortan el alma.
Y así, un plato que antes evitaba, hoy se convirtió en uno de mis preferidos: los garbanzos de mis viajes, llenos de historia, sabor… y recuerdos.
